‘Tech-partner’ del sector público


tx1Innovación, inversión y mejores prácticas, el aporte de los privados a los gobiernos locales para una exitosa gestión. Caso Grupo TX.

La administración pública efectiva no es una utopía, si esta se basa en modelos de relacionamiento y en hacer realidad los propósitos de cada actor involucrado. El Grupo TX entiende la importancia de esos modelos y sinergias y por eso ha sido un aliado de la función pública, desde lo privado.

Su modelo de negocio plantea una versión muy diferente a la de quienes han optado por ‘someter’ a la administración pública para obtener beneficios particulares.

El Grupo TX es un conjunto latinoamericano de empresas líderes en tecnología, caracterizado por brindarle soluciones integrales a los gobiernos estatales, departamentales y locales. Su génesis se dio 35 años atrás, cuando se posicionaba como una compañía constructora, si bien luego incursionó en el sector de infraestructura pública, en el sector hotelero y, posteriormente, en infraestructura tecnológica para la gestión pública.

Actualmente tiene presencia en doce países de América Latina y la diversificación de su portafolio obedece, básicamente, a que ha interpretado el ciclo económico de cada país para capitalizar oportunidades, “pero no con una visión economicista, sino de impactar en el mejoramiento de las realidades”.
En países como Venezuela mantiene su liderazgo en el sector hotelero. De hecho, contribuyó en gran medida al desarrollo de un polo turístico como es Isla de Margarita.

En cuanto a la infraestructura pública, este holding desarrolla proyectos en la modalidad de concesión (terminales de transporte, parqueaderos públicos, parques urbanos, plazas de mercado, etc.), con la idea de que el ciudadano del común, independientemente de su situación socio-económica o cultural, tenga la posibilidad de disfrutar un servicio público de alto nivel.

No obstante, su concepto va más allá de las meras construcciones. Para ellos, el éxito de la infraestructura pública no está en la inauguración de obras, sino en la operación y mantenimiento de las mismas (gestión inmobiliaria), tal como se hace en Europa, donde las piezas de arquitectura se preservan.

Para tal fin, desarrollaron una serie de aplicativos tecnológicos a través de los cuales se administran de una forma eficiente esas infraestructuras, evitando la proliferación de los denominados “elefantes blancos” y promoviendo que las construcciones sean jalonadoras de desarrollo y no fuentes de deterioro urbanístico.

Fue precisamente a raíz de esta oferta en infraestructura pública y de su sólida unidad de desarrollo tecnológico, que hacia finales de los años 90 una alcaldía venezolana les solicitó ayuda para hacer más eficientes sus procesos internos.

¿El resultado? Para la entidad, un mejoramiento exponencial; entre otros logros, aumentó 5 veces el recaudo con respecto al año anterior. Para TX, el surgimiento de la línea de infraestructura tecnológica para la gestión pública.

Alejandro Reyes, gerente del Grupo TX en Colombia y miembro de la Junta Directiva del holding, explica muy bien el papel de TX en esta unidad de negocio al diferenciar los dos componentes que tiene la gestión pública: “Por un lado, está la función administrativa propiamente dicha, la cual siempre recomendamos, en concordancia con la legislación, que no sea delegable a terceros; y, por el otro, el apoyo instrumental, que se traduce en medios físicos, técnicos y tecnológicos que ayudan a esa gestión”.

Es en ese apoyo instrumental donde entra TX con su oferta de valor: eficiencia tributaria, sistemas de inteligencia visual para entidades territoriales, catastro y georreferenciación, etc., mientras que la alcaldía o gobernación ejecuta y toma las decisiones.

Con este modelo, que se ha probado en numerosas ciudades latinoamericanas, se pretende subir el nivel de empoderamiento de la gestión pública y que la administración tenga la posibilidad de llegar a los habitantes… de cerrar esas brechas existentes entre el Gobierno y el ciudadano.

En Colombia, donde el grupo lleva diez años, esta es precisamente la línea más fuerte. Llegó al país tras diagnosticar que en muchas alcaldías, por ejemplo, los sistemas de información no eran adecuados ni seguros; que se requería mejores prácticas y mejores medios físicos; que la cultura ciudadana frente a la misión pública era escasa, y que se estaba recaudando solo un 20% de lo que se podría recaudar, no por mala intención de los gobernantes, sino por falta de instrumentos.

TX es consciente de que debe seguir liderando el proceso de pedagogía en el uso de estas herramientas en la gestión pública para lograr, entre otras metas, que más administraciones locales brinden una experiencia virtual de Gobierno, llegando a la fase transaccional.

Un diferencial importante de este grupo es que todos los proyectos los realizan con inversión 100% privada. O la hace él, si es en tecnología, y el cliente no debe dar ningún tipo de anticipo, o se encarga de ofrecer proyectos atractivos para que lleguen los recursos privados y así no comprometer los presupuestos escasos de las entidades públicas.

Actualmente, también existe una alianza de comercialización de productos vacacionales entre TX y una cadena hotelera que opera en Colombia, y aprovechando la modalidad de alianzas público-privadas que está impulsando el Gobierno, ha identificado una gran oportunidad de ofrecer a los gobiernos locales la construcción y desarrollo de terminales, plazas de mercado, parques urbanos, etc.

Por otro lado, y mientras sigue trabajando en la ampliación de su portafolio, maneja una línea de consultoría con entidades públicas. Recientemente, ha apoyado la elaboración de varios Planes de Ordenamiento Territorial desde la perspectiva del desarrollo de los estudios de amenazas, vulnerabilidad y riesgo ambiental, para tener datos precisos sobre suelos, sísmica e hidrología.

¿Qué nos deja este caso? Además de las obvias lecciones de management y emprendimiento, pone sobre la mesa un nuevo pacto entre el sector privado y las entidades públicas, donde el gana-gana y la apuesta por el desarrollo de las regiones y del país son la clave.

Las no pocas frustraciones en la ejecución de las políticas públicas han tenido como protagonistas a actores del sector privado con poca consciencia del interés general. El Grupo TX refleja una interacción simétrica entre quienes conforman la administración pública y sus proveedores; estos últimos, empresarios conscientes que no van por un ‘botín’ sino que muestran un interés genuino por servir y transformar positivamente la sociedad.

Escrita por Germán A. Mejía A., Director General de bmLab Latam. Publicada en el diario Portafolio el 13 de junio de 2016. Sección Estudio de Caso.